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TODAS, UNA: AHORA, NUESTRO MOMENTO
Ahora, es el tiempo que desaparece cuando proyectamos futuros o pasados automáticos, que perpetuan consensos, disfrutes de derechos, -fuera del respeto de la dignidad de hombres y mujeres-. Ellas decicidieron en su presente y vivimos con un horizonte más amplio, con cristales en las calles, de los muchos techos que rompieron.
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| Gracias Rosa Parks, Samurai (Onna bugeisha), Madame Curie |
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| Kathrien Switzer, Graça Nasí Mendes-Beatriz de Luna |
La violencia contra las mujeres, es de amplio espectro. En muchos casos, una estructura social-económica; médica que aún dice que tus metas son demasiado elevadas, simplemente por el hecho de ser mujer. Cuántas brillantes profesionales han sido eliminadas por el peso de esa violencia.
Coplas, boleros, tangos, valses, han sido la banda sonora del siglo anterior, en las que generaciones de mujeres eran estereotipadas y eran el referente de las relaciones de pareja. Una forma de educación, post-romántica, que fijaba en el inconsciente, prácticas que a través del tiempo, se actualizan y justifican de la sociedad patriarcal. El derecho de pernada de la sociedad medieval a la cultura del estupro. La justificación religiosa, filosófica y social para relaciones afectivas donde uno es persona y la otra no.
Precisamos que el idioma se active y permita describir otra sociedad, otra forma de las relaciones humanas, las relaciones de pareja. Sobre todo, de las mujeres jóvenes.
